viernes, 10 de agosto de 2012

El peligro de los "Sánchez Gordillos"

Me ha costado mucho despertarme de la apatía del verano. Ni una sola noticia me hacía levantar ya la ceja, pero el acoso, conquista y posterior expolio de supermercados, por las hordas de Sánchez Gordillo y la posterior acampada en terrenos del ejército, ha sido la espuela de mi vagancia.




Ya lo avisé en mi entrada:  http://campillo-castilla.blogspot.com.es/2012/03/que-se-refieren-con-politicas-de.html ¡Ojo con las políticas decimonónicas de izquierdas!




Yo no sé vosotros, pero llegado el momento yo defenderé mis propiedades, por pocas que sean, a capa y espada. Lo peor, es que yo no estaré solo en esta postura, y si hay gente que no reconoce la propiedad privada, y el Estado no es capaz de mantener el Estado de Derecho, la tenemos montada, porque como decía un clásico castellano: "Todo hombre, es en un punto movible". Lo que más me ha conmocionado es que hay una parte de la población que respalda este tipo de actuaciones, como parte de los habitantes del País Vasco, lo hacía y hace con los asesinatos cobardes de la banda de criminales ETA.

Si no actúa de forma contundente la fiscalía, estos "Sánchez Gordillos", enarbolaran la bandera del hambre mundial, de la justicia (la suya), de la crisis, del qué sé yo, pero como ya lo han demostrado son muy dados a actuar primero y luego argumentar; como lo han hecho con el robo de los supermercados, definiéndolo como una expropiación de alimentos... ni al mismo Goebbels se le habría ocurrido tamaña lindeza semántica.

Mi abuelo materno, era un hombre muy pragmático; además de honesto, austero y trabajador incansable, vamos lo que sería el perfil clásico de un Castellano. Como a muchos abuelos de mi generación, vivió y sufrió la Guerra Civil. El sorteo de la vida le acopló en un bando, como a otros tanto millones de combatientes que no decidieron por lo que luchar, pero tuvo siempre algo muy claro: lo que el había ganado con esfuerzo, dedicación y trabajo, no se lo llevaría ni Dios. Su patria era su familia y sus pequeñas posesiones, el Estado no dejaba de ser un mal que a veces era menor y a veces mayor.

No reconocer la propiedad privada, es el primer paso para un desmantelamiento de la estructura de convivencia, de las reglas del juego. Claro que hay individuos que tienen un patrimonio obtenido de forma oscura y mafiosa, pero este país está lleno de gente que se ha ganado lo que tiene con su esfuerzo y con su trabajo, y una cosa es estar a favor de ciertos argumentos "progres", que quedan fenomenal en una conversación con amigos y conocidos, sosteniendo una copa entre las manos, y otra es que esos argumentos se hagan palpables, llegando a tocarles la "cartera".

Confío en que esto solo sea un paripé, un sainete, una bufonada alimentada por los medios de comunicación ávidos de rellenar horas de programación y kilos de papel. Los verdaderos responsables de que esto se llegue a convertir en un verdadero problema, son los mierdas de políticos que lo respaldan, que lo disculpan, que han encontrado en esta forma de llamar la atención un filón para sus míseras vidas y para esconder su falta absoluta de talento y de altura humana. Con respecto a personajes del pelo de Sánchez Gordillo... hay un hueco esperándole, en el Museo Arqueológico Nacional

Os aseguro que no me temblará la mano si la situación se desmanda. Ni a mí, ni a todos aquellos que no somos asiduos a manifestaciones, sean estas del color que sean. Somos las gran mayoría, la que sostiene cualquier sociedad, la que mantiene el latir del grupo, la que en un punto es movible, y si llega ese punto sin retorno, abandonaremos el silencio y actuaremos; os aseguro que no será bueno para nadie.

1 comentario:

  1. Estoy de acuerdo contigo, amigo mio.
    A estos mangarranes, hay que pasarlos a cuchillo, el cuchillo de la justicia claro.

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