Ya tengo unos cuantos años y a pesar de mi experiencia, sigo haciéndome preguntas, intuyendo las respuestas.
Las primaveras árabes, que tantos minutos de información aportaron a los medios de comunicación occidentales, no parece que sea tal "primavera". Si tomamos como referencia a Libia, podremos comprobar que tras el derrocamiento de Gadafi, ya no hemos sabido más, pero os lo cuento yo, que he indagado en diferentes medios.
Libia se encuentra en este momento, totalmente desvertebrada. Distintas facciones intentando hacerse con poderes locales. Hay asesinatos y torturas, firmados por los antiguos liberadores. El gobierno provisional (CNT-Consejo Nacional de Transición), no controla la situación y se le acusa de que está formado por antiguos gadafistas. No hay policía ni ejército. Con el tiempo, los actuales 50.000 milicianos, que campan por sus respetos, pasarán a formar parte del ejército y de la policía. La única solución es que se celebren lo antes posible las elecciones previstas.
El primer ministro interino, Abderrahim al Kib, un catedrático respetado pero con escaso margen de maniobra, dice que todavía no se ha firmado ningún contrato con las compañías extranjeras, para la construcción de las infraestructuras nuevas... excepto en el sector del petróleo.
Hoy me he desayunado con la noticia de que la provincia libia de la Cirenaica, donde se produce el 70% del petróleo de país, ha proclamado su independencia...lo que faltaba.
Pero los medios españoles, no han informado, al menos yo no soy consciente, de que ya hay 6.000 soldados estadounidenses cuidando los pozos, y pueden llegar a 12.000.
Me he extendido con Libia, por la comparación sobre una posible intervención equiparable en Siria. No nos engañemos, las complicaciones de una intervención son muy altas, porque no solo es derrocar un régimen, es mantener luego el territorio, tratando de mantener un cierto equilibrio entre las facciones religiosas y regionales, y de eso Occidente ya es experta. Al final, lo que cuenta para decidir sobre un esfuerzo es tener clara la recompensa. En el caso de Libia hablamos de 1.700.0000,- barriles diarios, en el caso de Siria solo de 400.000.-
Nada más. Sobran más explicaciones. Esto es así, y así seguira siendo.
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